Bomberos voluntarios, agentes del Serenazgo y de la Brigada de Rescate de Surco auxiliaron a una mujer que terminó policontusa y sin poder moverse sobre la vía pública. Ella resultó herida tras despistarse el triciclo en que se movilizaba con su familia. También quedó lastimado su pequeño hijo. Su esposo, quien conducía el vehículo, afirmó que el accidente ocurrió por evitar atropellar a un perro.

El ciudadano venezolano Juan Rivero iba con su pareja María Mendez y su pequeño J. D. R. M. (5). Una señora había sacado a pasear a su mascota, pero este salió a la pista. En su intento por no atentar contra el animal, el extranjero viró su timón. Finalmente, terminó impactando contra una vivienda, en el cruce de la avenida Mateo Pumacahua y el jirón Hipólito Unanue.

La mujer quedó tendida boca arriba sobre la pista. No podía moverse. A la llegada del personal de la Brigada de Rescate de Surco y del SAMU (Servicio de Atención Móvil de Urgencia), se le inmovilizó el cuello y sobre una tabla rígida ingresó a una ambulancia. Junto a su hijo, herido de su mano izquierda, fue derivada al hospital Casimiro Ulloa.

“La señora estaba desmayada. El niño tenía un corte en una de sus manos y el padre solo un golpe. Lo que indica el reciclador es que una señora estaba sacando a su perro para pasearlo y por no atropellarlo, porque se le cruzó, se despistó. Se fueron contra una casa y dejaron una reja totalmente doblada”, dijo Cristian Gayoso, sereno de Surco.

El venezolano le reclamó a la propietaria del perro. Ambas partes dijeron que iban a llegar a un acuerdo. Sin embargo, el extranjero se descontroló por un momento debido a la situación de su esposa. Policías de la comisaría Mateo Pumacahua llegaron para hacerse cargo de la intervención.